Segundo, una vez que ya hemos observado todo esto, vamos a cualificarla de una forma precisa (recordemos, francotirador) haciendo gala de una comunicación eficiente inspirada en nuestra riqueza de lenguaje. Si todo resulta naturalmente satisfactorio, es decir, que las conversaciones y los encuentros sean poco a poco más agradables, podemos pasar al siguiente nivel, que es tener una cita. Para ello, debe hacerlo sonar como algo divertido y casual, nada excepcional. Asimismo es esencial que conozca suficientemente a un hombre para aceptar salir con él. Una vez un tipo me invitó a ver una película tras la primera semana de conocernos; naturalmente le afirmé que no, pues era obvio que quería algo más que una cita. Naturaleza destinado el pene para operar como un instrumento imantado altamente sensible, perceptivo. Aunque el pene y la vagina son órganos físicos, están diseñados para comunicarse en un nivel de energía refinada. Todo el pene es un canal, un conducto a través del que la fuerza vital se mueve del hombre a la mujer. La mujer recibe esta fuerza y la atrae cara sí misma. La contestación o comunicación entre los genitales se puede sentir primero como una vibrante sensación de vitalidad en un nivel celular fino. Cuando estamos atrapados en el hacer sexual, no hay ocasión de relajarnos y sencillamente estar en el cuerpo y experimentar esta vitalidad sutil. Cuando cesan los movimientos mecánicos, podemos empezar a sintonizar un nivel más fino de sensibilidad y sensibilidad delicada.

Puedes, por poner un ejemplo, disponer de un espéculo en el que veros reflejados de perfil

Mas en la vida real, las relaciones sexuales satisfactorias no son de esta forma. Si tienes relaciones íntimas con tu pareja como se ve en esos vídeos o películas; esa dama no va a quedar satisfecha, y jamás le darás el sexo de su vida. La penetro durante un rato, estimulando más su vagina hasta el momento en que empieza a jadear y me afirma que pare, que me quede quieto dentro de ella. Eso significa una cosa que a ella y a mí nos encanta: el masaje del Paraíso. Yo, con el pene parado dentro de ella, contraigo y relajo mis músculos del perineo una y otra vez, pues de este modo se levanta el pene tal y como si se hinchara. Estoy masajeando su vagina sin salir de ella, y esa sensación nos chifla. Pero yo me excito aún más cuando me responde apretando su vagina. Entonces siento que ella abraza más mi pene, que me quiere dentro de ella de veras. Inicio de este modo a darle buenas embestidas… Es la mujer que quiero, me gusta todo lo que me ofrece a lo largo del sexo. Y le doy el regalo que necesita: no parar hasta sentir los temblores de su clímax y haber eyaculado hasta la última gota de semen.

Las erecciones más recias que he tenido jamás fueron las que tuve cuando estaba tomando pequeñas píldoras de color para el pene. Podría haber lavado los platos, y mi erección seguiría siendo dura como una roca. ¡Comenzó a frotar a Cindy entre sus piernasla fuente de todos su placeres cuando él la besó en la boca, y sus lenguas se entrelazaron, la miró empezar a gozar… Yo considero que gozo en mi pantalón vaquero húmedo Ayúdame a terminar No la obligó, lógicamente, y frotó su gato duro y lento mediante su pantalón vaquero, mientras que él la besó y apretó sus pechos y pellizcó sus pezones. Y entonces éllabrió su pantalón vaquero y empujó su mano en sus empapadas bragas blancas, y frotó su clítoris de verdad, sintiendo su clítoris duro húmedo caliente latir contra sus dedos. Hay dos formas de hacer esto, la primera es cuando durante el congreso se da la vuelta y se sube a la cima de su amante, de tal manera que prosigue el congreso, sin obstruir el placer; y el otro es cuando ella actúa la del hombre desde el comienzo. En ese momento, con las flores en el pelo sueltas y las sonrisas rotas por las respiraciones, debería presionar el pecho de su amante con sus pechos, y bajando la cabeza frecuentemente, debería hacer a cambio exactamente las mismas acciones que solía hazlo ya antes, devolviéndole los golpes y sacudiéndolo, debería decir: Fui recostado por ti y agotado por el duro congreso, en consecuencia, ahora te lo haré a cambio. debería manifestar nuevamente su propia poquedad, su cansancio y su deseo de detener el congreso. De esta forma debería hacer el trabajo de un hombre,con lo que nos relacionaremos en el presente.

El BDSM, recalcan los amantes del mismo, es, simboliza e implica muchas otras cosas

Llevaba múltiples años en la capital de España, a donde había llegado procedente de un pueblucho de Galicia cuyo nombre no puse empeño en rememorar, y prácticamente exactamente el mismo tiempo tenía trabajando de taquillera en un Cineplex, anexo al teatro Calderón a donde acudí estrictamente un día sí otro no durante las semanas siguientes sin importarme la película. A eso de las 4 solía haber agotado mi interés por todo cuanto me presentaba el día, con lo que decidí que por esas cuantas tardes, de 4 a 6, sólo me importaría Dita. Tendría alrededor de cuarenta años, si bien parecía más joven, y era notablemente gordita, no maciza ni corpulenta, más bien fláccida, irregular de celulitis, gelatinosa, en fin, gordita, además tenía la cabeza prácticamente rapada y bastante más pequeña de lo normal, tal y como si le perteneciese a otra, y era justamente su cabeza, sentada ella tras el cristal de la taquilla, la que engañaba a primera vista sobre su obesidad. Evidentemente no fue su físico lo que me atrajo inmediatamente ¿quizás he sido yo de la clase de hombres que se detiene ante esa tontería?, fue la manera como me miró, y siguió mirándome los días siguientes hasta que atiné a decirle algo que no sonara trivial. Su mirada tenía una calma sin motivo en el caos que al mismo tiempo parecía desesperada, tal y como si hubiese presenciado lo peor que puede verse en la vida y lo hubiera subsistido y, más todavía, hubiese aprendido de aquel horror algo que la asistía a hallar placer, una especie de goce dentro de su catástrofe rutinaria que se elevaba por encima de las desgracias frívolas de los que nada habíamos sufrido realmente.

Liturgia de Iniciación de luna como sumisa por luna

Androginia: presencia simultánea de características femeninas y masculinas. A veces, esta diferenciación está mitigada de manera voluntaria por la persona, bien sea por la manera de vestir o por sus gestos, aunque no debe confundirse con la puramente fisiológica. De hecho probablemente este género de juegos hagan que ella trate de competir por esto y en lugar de que tu le arranques la ropa lo va a hacer y se va a poner pero salvaje de lo que hayas imaginado pero siempre asegurate de que tu estas a cargo y de que no se sienta poderosísima, por que lo sepa o bien no ella estará menos atraída cara ti si la dejas guiar la situación continuamente aun si ella solo considera que es apasionada. ¡Costoso que la pasión es imperfecta! Por el hecho de que es libido biológico. Es la base que mueve a la política a formación de las infinitas democracias dentro de la democracia universal, porque vive en la naturaleza de la perfección que no obstante, es mejorable.

El enfoque de Henry para introducir a su esposa en el estilo de vida de la Dominación Femenina es el procedimiento más efectivo. Si bien no todas las esposas abrazan tan de manera fácil los aspectos de D&S como lo hizo Doris, la mayor parte de las mujeres por lo menos gozarán ser atendidas por sus esposos de una forma tan desinteresada. La clave es que un hombre debe servir primero a su esposa y mostrarle los beneficios del estilo de vida FemDom antes que pueda hablarle sobre sus deseos fetichistas y de D&S. Aun si su esposa jamás aceptará absolutamente la Dominación femenina, creo que el hombre sumiso seguirá gozando de una satisfacción más sumisa al poner las necesidades de su mujer por encima de las suyas que él simplemente fantaseando sobre la Dominación femenina. Tras todo, 73

La disputa entre las fuerzas antagónicas (masculina y femenina) es lo que genera la energía que el opuesto requiere para sentirse íntegro; es el aporte de cada miembro a la unión. Se trata de hallar el equilibrio espiritual, psíquico y físico entre las 2 fuerzas, predominando generalmente la condición de género en que nacemos y cumplir con nuestra primera misión terrenal. No te lo pienses más y llámame. Puedo ofrecerte el más ardiente servicio GFE o bien, si lo quieres, el más desbocado, salvaje y lujurioso encuentro sexual que puedas imaginar. ¿Te espero, verdad? Envíame un WhatsApp. Te responderé lo más rápido que pueda. Deseo conocerte para enseñarte el significado exacto de la palabra placer.